Los pasos en una demanda de divorcio en Texas pueden variar dependiendo de las circunstancias específicas del caso, pero generalmente el proceso sigue estos pasos:
Uno de los cónyuges (el peticionario) debe presentar una petición de divorcio ante el tribunal correspondiente. Este documento debe ser entregado al otro cónyuge (el demandado).
El demandado tiene la oportunidad de presentar una respuesta por escrito a la petición de divorcio.
Cualquiera de los cónyuges puede solicitar órdenes temporales, que son órdenes judiciales que están vigentes mientras el divorcio está pendiente. Estas órdenes pueden abordar cuestiones como la custodia de los hijos, la manutención de los hijos y la posesión del hogar conyugal.
Las partes pueden reunir información y pruebas a través de un proceso llamado descubrimiento. Esto puede incluir el intercambio de preguntas y documentos escritos, tomar declaraciones y solicitar inspecciones de propiedad.
Algunos tribunales requieren que las partes asistan a la mediación en un intento de resolver sus controversias y llegar a un acuerdo.
Si las partes no logran llegar a un acuerdo, el caso procederá a juicio, donde un juez tomará decisiones sobre los temas pendientes en el caso.
Después del juicio, el juez emitirá órdenes finales que resuelvan todos los asuntos pendientes en el caso, incluida la división de propiedad, la custodia de los hijos y la manutención de los hijos.
Cualquiera de las partes tiene derecho a apelar las órdenes finales del tribunal ante un tribunal superior.
Es importante tener en cuenta que esto es solo una visión general del proceso de divorcio en Texas. Es una buena idea consultar con un abogado para entender sus derechos y responsabilidades en un caso de divorcio.